domingo, 18 de febrero de 2018

noche

cuando la noche se vuelve de esparto ni el mejor frontal sirve. no da luz suficiente, no hay leds que atraviesen la cortina de oscuridad que tenemos delante, que aporten la claridad que se necesita. no ilumina el camino a seguir, no advierte que falsas sombras son obstáculos qué hay que evitar si o si.

cuando la noche se vuelve espesa la experiencia previa no cubre lo que necesitamos. todas las horas acumuladas parecen pocas, los kilòmetros recorridos mientras otros dormían no nos aclaran por donde tirar, y nos ahogamos en la negrura de unas horas que nos atenazan con fuerza. nos aprietan sin compasiòn como insinuando que no habrà salida. que no volveremos a ver la luz.

cuando la noche se vuelve infinita solo vemos màs noche. oimos ruidos de abandono. olemos la desgana. sentimos que nada tiene sentido. preguntamos por què pasa y no sabemos responder. nuestra actitud se inclina hacia el lado que nos mete màs todavía en negrura. en nosotros mismos venidos a menos. en màs preguntas sin respuesta.

cuando la noche nos cae de golpe encima siempre hay alguien que nos puede ayudar. alguien que venga de un atardecer. de un mediodía. de un amanacer. alguien que nos diga que la noche no se puede eliminar pero se pasa. se aguanta, se combate. alguien que ya ha pasado noches y pasarà màs. como la tuya de hoy, como otras menos negras, menos espesas, menos infinitas, menos de esparto.

y cuando llegue la gran noche, para la que nadie esta preparado, sepamos que en la oscuridad que dejamos a la gente cercana habrà alguien que les acompañarà hasta que, de nuevo, se haga otra vez de dìa.....

3 comentarios:

  1. "Asomarse al abismo de nosotros mismos" dijo alguien... "Se pasa" digo yo...
    Un beso

    ResponderEliminar
  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar