lunes, 29 de julio de 2013

¿55kms con 4.000m+? Si, UT Catllaràs

La Pobla de Lillet, punto de salida de una carrera que nos deja claro-clarito (para el que lo quiera ver) que no hace falta diseñar grandes kilometradas para que un recorrido sea atractivo, duro y nos deje tan vacíos al acabar como seamos capaces de exprimirnos. Pero de circuitos (tamaños y durezas) podemos hablar otro día, si os parece.
Esta vez quiero utilizar el UT Catllaràs como excusa para, a medida que avanza el recorrido, comentar algo de las carreras en equipo. Entendiendo "algo" como lo que yo opino, que no cambió antes de la salida y después de la meta, pero ya con el pequeño grado que me dió la experiencia.
No debemos olvidar que yo me apunté como individual a la carrera. A los pocos días Sergi Cots tuvo el valor de proponer(me) hacer un equipo y...no me lo pensé mucho. En saraos con dorsal la experiencia reciente es que fuimos juntos 'porquesi' hasta su lesión en GRP 2012 -unas 12h-, en Barraques de Vinya le gané yo y en La Neorural él a mi :-)
Para mi salir con Sergi era un reto porque a veces entrenamos juntos y, cuando compite, sigo sus resultados. Se que a veces esta fuerte y otras muy fuerte, y de regalito baja mejor que yo. Ahora lo reconozco, nunca me habría atrevido a proponerselo pero...fue él.
Y de aquí a la salida. Yo con mis ideas claras, intuyendo que iban bastante en línea con las de Sergi: El ritmo del equipo es SIEMPRE el del más débil. Y en estas carreras da tiempo a flojear los dos. Si estas fuerte, te jodes y esperas. Si estas flojo, te jodes y aprietas. La cuerda del que va delante ha de ir tensa pero sin romperse. Y no hacer comba. Creo que es la forma de optimizar el resultado. No vamos a competir juntos para ir de charleta, pero si un rato hay que contar unos chistes o hablar de tías...se hace. Competimos para nosotros, por eso es importante hacerlo bien. Punto.
Y salimos ligeritos pero sin forzar. Delante hay galgos potentes (Miguel Heras, Jaume Folguera, Xavier Llamas, Marcel Batlle...) pero solo nos preocupa otro equipo al que no aguantamos el ritmo en la subida a Falgars. Ambos van oyendo música con cascos y comentamos extrañados como se entiende así ir en equipo. Pero rápido nos centramos en nosotros y cuadrar ritmos. La temperatura es buena y Sergi hace un pequeño resumen del recorrido -que él ya conoce-. En las dos primeras horas ya veo que la temporada tan buena (y larga) que lleva le puede pasar factura en forma de cansancio en las subidas y no le debo descuidar. Tenso un poco la cuerda. Aguanta como un toro. Mantengo la tensión y en las bajadas le dejo irse unos 25 m porque necesito ver bien donde piso bajando a su ritmo, un pelo más rápido que el mio. Ahora soy yo el que aguanto como puedo. Desde Falgars charlamos mientras cresteamos antes de bajar a Sant Julià de Cerdanyola. Avituallamiento km 13.
Otro punto clave de las carreras en equipo es los avituallamientos. Se ha de hablar. No cuesta nada, mejor antes de llegar que ya parados delante de la mesa, sin miedo a preguntar: ¿Oye, tienes mucha hambre? ¿Vas a coger agua solo o más? O comentar: Tengo una piedra en la zapatilla. Pararé para sacarla en el avituallamiento. COMUNICACIÓN. Qué el otro sepa lo que "le viene". No tenemos hambre al mismo tiempo, no necesitamos las mismas cosas ni el mismo tiempo para comer y/o beber. Me da igual lo que quieras hacer pero va bien saberlo.
Salimos a buen ritmo para pasar la chincheta de la Creueta y bajar a Malanyeu. Tramo que pasa rápido. El cuerpo ya ha entrado en calor y el cansancio no aparece. Temperatura ideal y sombra. Vamos haciendo la goma con otro corredor (Joseba) y con este entretenimiento pasan rápido los kilómetros. Nos vamos preparando para la primera de las dos subidas más largas del día.
Desde Malanyeu a El Graell de Pujals podrías pensar que elfos y duendes te observan. El entorno es mágico y trozos de bosque con cascadas de agua dan un ambiente de cuento de hadas a la carrera. Solo se rompe la magia cuando el equipo que va tercero nos pasa a buen ritmo. Y Joseba se va con ellos.
-"Tranquilo Sergi. Nosotros no somos de ir a buscar el podio. Cuando lo hemos tenido ha venido él a buscarnos a nosotros". Y Sergi se ríe. "Yo me doy cuenta que no estoy hecho de "madera de campeón" porque siempre me preocupa más que me enganche el que viene detrás que de pillar al de delante", remato -"Joder, igual que yo. Vaya par"
Y encumbrados ya a unos 1.600m nos tiramos para abajo a buscar La Nou y el Sobrepuny. A nuestro ritmo. Con nuestra cuerda tensa pero sin romperse. Una vez tenso yo, otra él.
Paradas a mear. Otro punto clave de las carreras en equipo. Yo creo que cada uno debe parar cuando le apetezca, no aguantarse. El otro no para, tira pero baja el ritmo. Así lo hicimos. Salió bien.
La subida a Sobrepuny a mi me encantó. Reconozco que es del tipo de subidas que mejor me va. Disfruté. Sergi apretó bien y aguantó un ritmo mantenido sin quejarse. Solo paramos a la mitad para charlar con Diego GR y hacer una foto, creo que representativa de lo que he escrito.


Superado el techo y con más de la mitad del desnivel en las piernas el coco de ambos manda apretar en la bajada para intentar recortar algo a los terceros. Una bajada dura pero preciosa junto a un riachuelo, con destrepes y resbalones entre arboles nos deja con Castell de l'Areny y uno de los componentes del equipo que nos pasó a la vista. Lleva la rodilla tocada y se retirará en el control. Otra vez segundos.
Contentos por el puesto recuperado y con el "soplo" que el equipo de delante no van juntos salimos con ganas para subir, ahora ya con calor hasta Sant Romà de la Clusa. Subida que se atraganta un poco por el calor y lo que llevamos ya. Paramos donde sopla algo de aire y bebemos agua cada poco para evitar calambres. Hemos bajado algo el ritmo pero aguantamos. Queremos correr al final.
Y salimos del refugio bien ensandiados y enmelonados. Hacia R. Ardericó. Gas!
Falso llano que pica hacia arriba. Sombra para apretar, sol para aflojar. Y bajada tiesa hasta el refugio. Allí nos avituallamos, sobre todo líquido y Sergi compra una cocacola. El olor a hierba quemada/fumada es acojonante :-) Nos cuentan que no hay ningún equipo como tal por delante. Parece que somos 'según el reglamento' los primeros. Alas en los pies para subir al Joc de Pilota. Alas que a veces se enganchan entre los arbustos y nos hacen ir lentos. Las horas y desnivel que llevamos no nos lo quita nadie. Se alivia algo al llegar arriba y encarar los 7 últimos kilómetros. A MUERTE !! Estos si son ratos de charleta y repaso de momentos. Esto si son ratos de sacar lo que te has guardado. Esto si son ratos de pensar en la cerveza de meta. Y esta vez en podio. Nos ha venido a buscar. Y para ponernos, en 7h56, en lo más alto...como EQUIPO.

martes, 23 de julio de 2013

Hay más Cadí que Cavalls del Vent (y II)

(disculpad el retraso, mi ordenador no tenía tantas ganas como yo de acabar)
...Vuelvo la vista, de reojo, como si no me importara, hacia la bajada al refugio de Prats de Aguiló y no veo a mi perseguidor. Sonrío y me alejo mientras oigo alguien que grita: "Dosifiiiiica" Si claro, si fuera tan fácil....
Se baja un rato por la pista, entras a la derecha por un atajo y vuelves a salir más abajo a la misma pista. Sigues y cruzas a la izquierda. Joder, que bien van las piernas, pienso. Las cuentas de la lechera me dejan hacia las 16:00 h en meta. Genial !!

Pero no tarda en caerse el cantaro al suelo, romperse y derramarse hasta la última gota de leche. En un sendero estrecho y revirado dejo de ver marcas. No pasa nada. Vuelvo a atrás. Encuentro la última y vuelvo. Mismo sitio, misma sensación de perdido. Iñaki (que no compite) aparece con su perra Boira riachuelo arriba.
- Eyyy, llevo un rato aquí perdido, me dice.
- Pués ya somos dos, contesto.
Y juntos intentamos encontrar el camino. Y en intento se queda.
A los 10' llega el 5º y luego el 6º y el 7º....y hasta el 9º que conoce el recorrido y nos saca de allí.
Han sido, para mi, unos 45' de hamster. La cabeza se resiente. Iba solo el 4º y ahora somos 6 tíos en fila que vuelven a seguir las marcas. O me voy o me hundo. La cabeza es así de cabrona. Y me intento ir en la bajada. La jugada no sale mal y al acabar la bajada, antes de subir a Estana estamos solos Toni Calderón (era el 5º) y yo. Y mientras comenzamos la subida me dice algo así (no lo recuerdo exacto):
- Y ahora ¿qué?
- Pués yo no me voy a intentar ir. Y si tu lo intentas haré lo posible porque no te vayas pero tengo el coco para llegar y poco más, contesto
- Pués vamos juntos, dice Toni
- Creo que es lo mejor.
Y así comienza la última parte de la carrera. De como de no conocer a alguien acabas la carrera con un nuevo amigo. Genial. Ritmos parecidos y que se complementan. Charlas las justas y necesarias. Conscientes los dos que sin habernos perdidos ahora la carrera sería otra...pero es la que es. Adelante juntos.
Y comienza la colección de subidas y bajadas, bajadas y subidas. Sol y sombra, sombra y sol. Calor y calor. Cava, Ansovell, coll de Avanses, coll de Lletó.
Momentos duros cuando el terreno invita a correr pero no se puede. Falsos llanos trotables con intentos que no pasan de los 100m. Repechos de risa que tensan los gemelos como si fueran verticales. Relevos del "equipo". Hoy yo subo más fino (se que Toni no es manco cuesta arriba) y tiro delante. Él es menos torpe bajando y buscando marcas y yo me limito a seguirle.
- Tengo sales si vienen calambres, dice.
-  Y yo agua de sobra si te quedas sin, contesto.
Y trás el último reagrupamiento del último repecho vemos ya la Seu. No esta cerca pero la vemos. Algo más de una hora calculamos.
Y casi dejándonos caer (poco más podemos hacer ya) nos lamentamos de habernos perdido otra vez más. Nos relajamos y hablamos de futuros proyectos, de amigos comunes, de carreras que uno conoce y el otro no. De cerveza. Bien fría !!
Casí sin darnos cuenta tocamos pista de cemento primero y asfalto después. Y la meta. Primero con la vista y luego pasando por debajo del arco de meta. Ahora sí. Nos hemos ido a 11h45' que, sin duda, podían haber sido peores.
Contentos, secos, satisfechos de haber levantado una moral arrastrada durante unos cuantos kilómetros. Felices. Otra más al saco. Y seguimos...

viernes, 19 de julio de 2013

Hay más Cadí que Cavalls del Vent (I)

Somos tan simples que muchas veces, como en el cuento de Las 7 cabritillas, viendo solo la pata enharinada del lobo por debajo de la puerta concluimos que es mama Cabra. Y, como todos sabéis, eso no es del todo cierto. Pués, a mi me ha pasado eso con el macizo del Cadí y la "patita" de Cavalls. Y, gracias al recorrido del UT Cadí, he descubierto una parte muchó mas 'montañera' de este macizo. Protagonista: la gran carena, de unos 15km y todo el rato alrededor de los 2.400m. Brutal !!


Pero todo comienza el día de antes, la tarde de otro viernes largo y nervioso, acabando de pulir detalles de lo que se acerca. Un viaje tranquilo con el amigo Jaume, los trastos de correr y un par de sacos de dormir. Desde Santpedor hasta La Seu el viaje pasa rápido y pronto estamos con los deberes hechos: recogido el dorsal, oido el briefing, probada la cerveza del pueblo y mirando al cielo cubierto para ir eligiendo sitio donde tirar el campamento.

Bolsa del corredor :-)
                          Hotel 5 estrellas y pico

La noche pasa rápido (mejor así porque no pegamos ojo) y a las 3 ya estamos yendo para el coche a ultimar detalles. Desayunar (por la hora que es, mejor recenar) arroz blanco con atún y huevo duro, beber un café y a la salida. Pam !! 5:00 AM
Me gustan esas carreras en las que parece que nadie quiere ponerse en primera fila, esos comienzos tranquilos en lo que nadie quiere tirar delante, esas salidas en las que la gente va de charleta. Me gustan, pero me dan mucho miedo....esta cumplía todos los requisitos.
Tiro delante sabiendo que no es mi sitio pero nadie quiere pasar. Pido relevo para el primer puesto porque no es ahí donde tengo que estar yo. Hay gente mucho mejor detrás que no se a que espera para tirar. Nerviosillo ! Cuándo el terreno empieza a picar para arriba me aparto y a la luz del frontal pasan dos: Guido y Xavi (1º y 3º en meta). Veeenga, alguno más que pase, pienso. Y a los 100m me adelanta Cuadrat (2º). No intento seguirlos porque se que no es mi guerra, pero mientras va amaneciendo y seguimos subiendo a Coll de Lletó 'mido' por su respiración, como el que me sigue se queda algo cuando aprieta la subida pero recupera cuándo es más plano. Lleva el frontal apagado (luego me enteré que le falló) y la luz que siempre es delatadora de como de cerca lo tienes, hoy no me sirve. Llevo un ritmo cómodo, estoy más o menos agusto, subimos, subimos y subimos hacia el Cap de la Fesa para comenzar la famosa carena. En el último avituallamiento suena un acordeón. Guardo el frontal, como y bebo, hablo con Mireia, miro atrás y sin rastro del quinto aprieto en la última pala bastante vertical y ya pelada de vegetación, antes de llegar a los 2422 m.

La carena es impresionante (la foto primera), parece no tener fin. Es dura de trotar pués tiene ligera caida a derecha y mucha piedra suelta. Además de larga acumula desnivel positivo, calculo algo más de 1.000m y en condiciones de mucho calor puede ser un infierno. Por eso, mientras el sol flirtea con las nubes, voy tirando a buen ritmo sin dejar de mirar atrás. La visión es amplia y de lejos observo que 5º y 6º van casi juntos pero calculo una renta de 10'. Nos vemos todos. Es vital mantener ese espacio. Aumentar si se puede. Y van pasando lo subeybajas a costa de ir dejando más fuerzas de las que tocan cada vezque tropiezas o casícaes. Y con la vista puesta en un punto indeterminado donde, más o menos, yo coloco Pas de Gossolans. Por tres veces me equivoco y las marcas me llevan hacia otro lado. Como para ir "al bulto"... En la última bajada a la cabaña de Cortils me giro y, viendo el resultado, me siento satisfecho del trabajo hecho frente a los que me siguen. Son las 9:15, repongo agua y afronto un último repecho para bajar luego a ref. Prats de Aguiló. De pronto, arriba del todo me viene a la mente el recuerdo de Teresa. Y no viene a cuento pero grito su nombre y se me encoge el corazón. Con la vista algo nublada y una fuerte presencia de color naranja en mi mente saludo al juez de FEDME en Pas de Gossolans y encaro la bajada al refugio. Son las 10:00h y, mientras pico algo salado charlo con el guarda y con la gente que esta allí. Creo que más o menos esto es la mitad (en tiempo) del ultratrail...

martes, 2 de julio de 2013

Raül Koala, el contador de Volls

La pimera vez que lo ví fue en la cena pre-Maratón Pirata de Montserrat 2011. Le regalaron unos calzoncillos y nos lo agradeció con una "luna llena" maravillosa...y bien peludita. Se le fue la mano con la ratafía y al día siguiente reventó dignamente como una rata, pero antes recortó todo lo que pudo y más. Eh, y sin complejos :-)
Volvamos al presente.
A pesar de lo que pueda parecer no hace tanto que conozco a Raül. Eso si, ha sido corto e intenso. Por eso creo que puedo permitirme el lujo de escribir algo sobre él aún a riesgo de equivocarme. A lo largo de los últimos meses hemos compartido algún entreno, ratos muertos, aventuras -como lo llama él-, birras, buffets libres y hasta cama (o sofá cama). Raül es un tío que, pienso yo, es sobre todo generoso y optimista. Pero...tiene una capacidad acojonante de liar al personal para que se embarquen en las historias más descabelladas. La piel de Koala le proporciona la coartada perfecta para enmascarar todo tipo de triquiñuelas y liadas y salir bienparado de CASI todas. La mayoría de las veces le agradeceras el empujón que te ha dado para hacer algo. Alguna que otra te cagarás en él. Seguro.
Contagia ganas de hacer cosas, despierta interés por actividades en las que ni te fijarías, ahuyenta el desánimo y el mal rollo. No, mejor aún. El mal rollo y el desánimo huyen de él como alma que lleva el diablo. Estar a su lado es como tener un amuleto de "todo incluido". Y, a pesar de todo, hay veces que lo matarías. Con cariño, eso si.
foto: campeón de mundo de Mallorca312 en tandem

En cuánto a mi experiencia personal puedo decir que él en primera persona (pero lo extiendo a unos cuántos Koalas más) se ha convertido en un re-dinamizador de mi vida. En un momento que no sabía muy bien que hacer, ha tirado fuerte de mi para recuperar las ganas de volver a remangarme, apretar los dientes y salir al barro. Mallorca 312 -premeditadísimo- y UT Mitic Andorra -casi por casualidad- son los dos ejemplos más claros. Si habéis leido el blog sabréis de que hablo.
 Y risa a risa, cerveza a cerveza, kilómetro a kilómetro y almohada a almohada se va forjando una buena relación de amistad , sin ningún compromiso pero pienso que con futuro. Hay muchas cosas en las que coincidimos, otras no tanto. Pero ya todos tenemos espolones como para resetearnos del todo ahora. La sensación es que nos complementamos y además aprovechamos eso. Somos la hostia, no? Bah !
Releo y veo que todo esta quedando muy serio. Y la vida no es eso, los ratos juntos con Raül tampoco. El Koalita te enseña que, si no vas a ser campeón del mundo -él lo es, mirad la foto-, una cerveza en un avituallamiento no es ningún pecado. Y luego ya subirás la cuesta o bajarás la trialera. Te enseña que si necesitas algo y, lo pides bien, no te vas a acabar lo que te den. Te enseña que si te piden, da para que no se les acabe lo que piden. Y te enseña muchas cosas más. Pero no todas se han de aprender... verdad Raül?
Y la frase que más me gusta de las que le he oido, ya escrita en la crónica de Andorra: "Somos buena gente. Y a la buena gente siempre le pasa lo mejor que le puede pasar". Esperemos que la primera afirmación sea cierta porque, si no, el resto se cae solo :-)
Y si Kilian quiere contar lagos, que los cuente. Nosotros contaremos birras, que eso no lo hace nadie...

Que n'aprenguin !!