miércoles, 19 de marzo de 2014

UT Les Fonts. Homenaje al corredor de montaña-

Entrante: Nocturneta, 23 kms y 350+
Primero: Ultratrail, 70 kms y 4.000+
Segundo: Carrera, 27 kms y 1.650+
Postre: a escoger entre los recuerdos

Cuándo llegas a Xerta has de estar hambriento de correr. El menú que presenta el UT Les Fonts es capaz de satisfacer al más exquisito gourmet de trotar por la montaña. Y como la cantidad de platos que engullirás los escoges unos meses antes, lo único que puedes asegurar -para evitar el empacho- es hacer bondad los días antes para llegar famélico. No es tan fácil, creedme.
La segunda clave es, en mi opinión, dosificar bien los 3 platos para poder gozar de todos. Cebarse en exceso al principio es un clásico cuándo te sientas a una mesa con ganas de devorar lo que caiga. Carga mucho del entrante o el primero y dejarás la  mitad del segundo. Incluso sufrirás con escoger el postre, si no lo pierdes. Tampoco esto es fácil.

El entrante de la Nocturneta apetece mucho, son "solo" 23kms casi planos que se comen a oscuras. Eso ayuda a no tragar los trozos sin masticar, pero aún así nadie quiere ir a dormir tarde. El trote a la luz de la luna, seguramente ofendida por el uso de tantos frontales, comienza siendo regenerador de sensaciones y debería ejercer su función de abrir apetito para el plato principal. Voy en el segundo grupo de unos 5 o 6 a ritmo de comer y charlar. Nadie se atraganta y comentamos los sabores. Relevos en cabeza y al salir de Aldover comento con Imanol que los primeros ya ni se los ve. Un poco más adelante nos dicen que el grupo de cabeza se había perdido y vamos delante. De alguna forma y casi sin querer, apretando eso si, engullo en un tenedor dos trozos de lechuga que me quedaban y vacío mi plato: 1h41'35''. Satisfecho.



El primero es, como tiene que ser un primero, potente. De cucharón, con fundamento. Ultratrail de 70kms y 4.000+
Desde que terminé el entrante no ha pasado apenas tiempo y a las 6:00AM estamos de nuevo sentados a la mesa. Esta vez la olla es grande y el contenido con más sustancia. Por delante se adivina un alimento energético a tope para degustar. No vale echarse atrás, hay que empezar. Cucharada a cucharada. Sin llenarlas mucho al principio, cargando más a la mitad y procurando que al final, con el pulso no tan firme ya, no caiga el contenido de las últimas. Las patatas son más fáciles de digerir pero yo prefiero los trozos de carne que encuentro en las subidas. Los muerdo con cuidado para no hacerme daño pero sacando todo el sabor. En las bajadas es fácil mascar rápido e incluso tragar un trozo entero de patata que se quede luego atascado en las tragaderas y, al volver a comer carne, no te deje degustarlo. En la bajada a Alfara me caza el autobús de vascos que viene apretando fuerte desde la subida anterior, intento cargar la cuchara como ellos pero...la siguiente ya vuelvo a mi dosis. No es mi guerra. Al menos hoy no. Acierto. Pero el daño ya esta hecho y sufro en la bajada. En la última subida recupero algo pero me conformo con vaciar el plato. Y sufriendo consigo hacerlo en 9h30', sorbiendo el caldo que queda casi sin fuerzas. Mañana costará...pero se hará. Ahora a digerir.


Y llega el segundo. Carrera de 27kms y 1.650+
Hablo con Santi porque me molesta una bursitis en la planta del pie izquierdo y la zona trasera de la rodilla derecha (culpa de las patatas que quise comer a ritmo euskaldun). La conclusión es que haga trocitos pequeños del plato de hoy y, si me veo con fuerzas, cuándo lleve un rato los coja de dos en dos. Y así hacemos. Calienta bien al principio y si no duele, aprietas. Puedo decir que disfrute del plato. A tope. Saboreando y bien regado cuando hacía falta. Roce las 3h15' y no puedo decir que la ración se me hiciera pesada. Sabrosa si. Pero tuve esa sensación de ajustar la cantidad al hambre que tenía y rebañar el plato con el último trozo de pan que suele quedar junto a la servilleta. Riquísimo todo.


Queda el postre, ¿no?
...yo escogí ayer: REPETIR.

Puedo también decir que los compañeros de mesa durante estos días han sido excepcionales. Los que llevé puestos y algunos que conocí allí. Compartir mesa es algo que no se puede hacer con cualquiera. Sobre todo cuando encima ponen manjares. Yo, acerté. Por ello me considero afortunado. Gracias !

2 comentarios:

  1. Pues con Mortadelo de chófer, bien raro que el autobús de vascos no se estrellara :P Un gusto estar sentados en la misma mesa; y ojalá tuviera tanto apetito como tú, el menú me duró como 5 horas más. Ah, y felicidades por la victoria nocturna, has olvidado comentarlo ;)

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  2. Esteban, ets un crackote mix!
    El teu relat del 'menú' m'ha deixat mooooolt tip.
    Boníssim, una vez más.
    Grande!

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