sábado, 27 de julio de 2024

pt281: dulce y salado (y IV)

mirando tiempos y sin contar la hora y media durmiendo, lentiscais fue la parada más larga que hice. estuvimos comentando muchas cosas vividas y proyectando algo de lo que quedaba. durante todo el recorrido a las espaldas ya, mucha gente había estado pendiente de mi y preguntando como iba, pero tiene una relevancia especial el mestre cañellas. si alguien me conoce bien a nivel de rendimiento deportivo, puntos flacos y fuertes y capacidad de resistencia es él. y estoy convencido que detrás del resultado final es uno de los principales culpables. su consejo de salir detrás de luca papi me lo había petado desde el kilómetro uno pero siempre -creo- llevando ese ritmo que los dos acordamos y que permitiera estar fresco tras la primera noche. y lo estuve, toni, lo estuve. o sea que podemos decir que cumplí al 50%...bueno, el 60% :-) el tirón de orejas llegó en un audio que albina me puso hasta 3 veces y cuando papi me atrapó pensé que entonces era el momento de ir juntos...pero acordaos que pasó: luca me dijo que mejor mantuviera mi ritmo y no intentara ir con él. y eso hice. ritmo que al final me llevó a volver a conectar con luca y que ahora me dejaba solo y con 80kilómetros por delante. conversaciones de este tipo y mensajes de más gente que estaba pendiente me llevaron a estar entretenido con el equipo y salir tras unos 50' de descanso.
el tramo desde lentiscais a la 6ª base de vida de vila velha de rodao es de esos que se deja hacer. amanece a poco de salir y es bastante "rapidillo" para la altura a la que estamos. aparecen un par de ampollas que me hacen ir corrigiendo la pisada y que después pincharé. tramos de pista y asfalto intercalados de una manera agradable que presentan un nuevo día que volverá a ser caluroso. y una parte final llegando a vila velha que se hace larga bordeando una zona industrial poco agraciada. sentado en un banco chequeo y sano el pie tocado y como un par de platos de sopa que entra de maravilla. antes de encarar la etapa siguiente donde hay unos 1000m de desnivel positivo noto ya que el sol no dará cuartel y cargo bien de agua. antes de salir aparece luca que viene de dormir un rato y ha venido hasta vila velha en el coche con mi hermano y compañía. le pregunto por lo que queda y con la info fresca que me da y el cuerpo calentito que traigo de serie, salgo para montes de senhora.


la etapa que viene me apetece, tengo ganas de hacer desnivel, de caminar y subir. pero el primer tramo es por una carretera sin apenas arcén y es feote. noto que la mochila me baila más de la cuenta y veo que se ha roto una goma de un lateral. nada que no se pueda arreglar pero donde haya sombra y fuera de asfalto. aprovecho un bar de pueblo donde tomo un café mientras apaño el tema.
harto de correr bajo hasta un río donde esta mi equipazo en bañador que va a probar si el agua esta fría, eso si después de lanzarme monte arriba. un monte que ha sobrevivido a un incendio y que sin dificultad técnica y por relativa sombra te sube por un lado y te baja por el otro pisteando. se pisa mal, las máquinas ha estado trabajando y la tierra esta suelta y hace badenes.
pienso más cuando subo que cuando bajo. y aquí pensé mucho. porque llegar aquí tan bien como me encontraba no es ni casualidad ni se hace solo. ¿cuanta gente empujando ahora? ¿cuantas conversaciones en un sofá con el jefe?¿cuantas charlas en el vestuario del beat?¿cuántos viajes en coche con este tema? y sobre todo, ¿cuantas cervezas hablando de estos 3 días? llegando a la parte alta de esta etapa lloré flojito escondiendo las lágrimas entre el sudor que me caía por la cara. lo salado de los dos líquidos se fundió y quedó retenido en el bigote. ese bigote que era un homenaje a santi, a él y a su forma de hacerme ser mejor corredor y mejor persona.
en la bajada dejo de pensar y el último repecho de asfalto antes de montes de senhora ya no da más que para prepararme para entrar en la base de vida poniendo banda sonora a la carrera. una canción batallera que preparo en un momento y bailo delante de los que me esperan. no se merecen menos que alegría y risas.
comer, beber y salir. quedan 23kilómetros y ya solo quiero llegar. no voy a decir otra cosa. o sea que camino de meta troto todo lo que se puede y lo intento donde no se puede. solo lo intento porque son arranques fallidos. ya toca esto, pienso. me han dicho que estamos a unos 35-36º pero a mi me parece que hace más calor que el día anterior. rui va casi dos horas delante y faustino que va detrás hará la última etapa con su hijo. cada corredor, una carrera. cada persona, un objetivo. cada equipo, una dinámica. y a mi la nuestra me encanta. por eso les he pedido entrar todos juntos en meta con las camiseta de #losjefes. hago los últimos kilómetros con esfuerzo, quizás de los más lentos de todos. la meta esta cerca y el cuerpo ya lo sabe. negocio con él en silencio y los últimos 5 nos los dedicamos con tranquilidad y saboreando. un sabor muy dulce que vuelve a provocar saladas lágrimas cuando veo al fondo de la avenida la meta. la meta y mi gente. y la gente de la carrera que ya es también mi gente. no quiero acabar, ahora no...
giro y voy tan ancho que no se si voy  a pasar por el arco de meta. satisfecho de la gestión conjunta, orgulloso de como lo hemos parido todo, atropellado en pensamientos y envuelto en emociones increibles. la meta física se queda corta para lo vivido pero en algún sitio se tiene que acabar. por eso escribo, por eso miro fotos, por eso cuento, por eso habéis llegado hasta aquí conmigo. GRACIAS! yo solo he corrido, trotado o andado. lo demás es vuestro (ya sabéis cada uno lo que os toca).



nota: para los que habéis preguntado, #losjefes son nuestros padres, que nos gustaría que representaran a los padres de todos. santi y esteban, esteban y santi. ideamos juntarlos en persona pero no pudo ser, por eso los juntamos en este dibujo que llevamos en las camisetas (ahora tendremos una deuda con #lasjefas que habrá que solventar...). es un homenaje sencillo y sentido a estas dos grandísimas personas. un homenaje que nos han devuelto, sin saberlo, regalándonos a los 4 unos días juntos compartiendo vida, kilómetros y momentos inolvidables



viernes, 26 de julio de 2024

pt281: que venha o diabo e escolha (III)

con el primer trote me reubico a mi mismo: estoy dejando atrás la 3ª base de vida (nossa senhora de azenha) y llevo en las patas 130 kilómetros cuando son casi las 13:00h, o sea que llevo diecinueve horitas. al llegar a la 4ª (idanha-a-nova) dormiré un rato para bajar la temperatura que no tengo duda que me va subir en este tramo. y además me va a permitir encarar el vale de morte y la segunda noche con garantía de éxito. y como parte de esta reubicación repaso la conversación con el director de carrera hace unos minutos:

- paolo, ¿qué es más duro: de aquí hasta idanha-a-nova o después de idanha?

calla 3 segundos y, con la pausa que habla, me dice despacio y sonriendo:

- que venha o diabo e escolha. ¿entiendes?

¿entiendo?... de esta parte tengo el recuerdo más difuso de todo. recuerdo mucha pista ancha en continuo subeybaja, con algunos tramos de mucho polvo. recuerdo alguna alucinación de ver gente en grupo charlando e incluso el coche de mi hermano a la sombra de unos eucaliptus. todo inexistente y que me hacía sonreírme al descubrir la realidad: siempre arbustos que se movían por un aire que entra por la nariz quemando y pesado. respirar por la boca era secamiento extremo hasta la garganta (y beber más). la sensación paradójica es que se me pasó rápido-por eso creo que no recuerdo todo bien-, pude trotar bastante y me encontraba animado y fuerte. o eso pensaba yo, porque cuando me encontré con el equipo en un merendero mi cara debía contar otra película. apenas eran 8 kms los que quedaban a la base de vida pero entré en el bar del merendero y pedí cocacola y agua con gas. sentados en una mesa, se abre la puerta y vemos entrar a luca papi que se sienta con nosotros. y no se pueden describir las siguientes horas de carrera sin conocer algo de la conversación que ocurrió allí. luca nos cuenta que va bien pero que tiene tope de hora para llegar a meta por un vuelo cerrado el sábado desde lisboa. yo le digo que no voy con él porque seguramente irá más rápido que yo. esta de acuerdo. me recomienda llegar tranquilo a la base de vida, comer bien, dormir 1h30' y aprovechar la noche (era nuestra idea o sea que perfecto). y sale a su ritmo. yo detrás, al mio.

pocos metros después veo que se gira y me dice que "vamos juntos y a ver que pasa". yo voy cómodo con él, incluso subiendo a la base de vida por las calles del pueblo le he de esperar. no es que yo vaya fino es que él va tocado. pero entramos juntos en la base de vida y cada uno gestiona su parada. yo como me despido de él y me voy a dormir. el se queda allí mientras le curan un pie para salir de nuevo.

pasan los 90', me despierta albina y sin mover testeo el cuerpo. no parece que este muy machacado. me pongo de pie y repito el test otra vez. joder, muy bien. y descansado. y más fresquito. vamos, que nos vamossss! próxima parada es lentiscais donde ya será oscuro y me animo pensando que ya estaremos por encima de los 200kms. me venden la idea que quedan 3 maratones y es verdad. pero la primera es del tirón, de noche y sin opción de agua si no te desvías de la ruta. pero vale, lo compro: "solo" quedan 3 maratones. ahora viene una zona de abrir y cerrar cancelas. que ya nos han avisado que es área de ganado y no se puede fallar en eso. pues con la segunda noche metida hasta las trancas, rota en pedazos otra vez por la luna llena supero un tramo largo de asfalto trotando antes de empezar el abrecierra de puertas. y sobre todo voy dosificando un agua que me ha de durar hasta lentiscais, 5ª base de vida.


tras un pequeño traspiés que me deja con rodilla clavada en tierra como un caballero medieval, camino rápido -donde se puede trotar- para que se pasen las molestias pronto y entro en el bar que hace de base de vida de lentiscais con la primera de las 3 maratones cumplidas. en ningún momento pensando en atrapar a luca papi que iba delante y seguramente cumpliendo su plan. pero la sorpresa esta cuando me lo encuentro allí, tirado en el suelo, dormitando y dando por finalizada su participación este año. si me analizo me deprimo, pero si me comparo me ensalzo, dijo san agustín. lo pienso y me vengo arriba...llevo casi 34h para 201kms. quedan "2 maratones"  y voy segundo.


jueves, 25 de julio de 2024

pt281: la romería (II)

la noche siempre se me ha dado bien, no nos vamos a engañar. por eso salía confiado tras despedirme de mi gente en sabugal. conocía el recorrido hasta penamacor del año anterior incluso diría que lo tenía "controlado". se venía una etapa larga y donde se podía trotar mucho rato de principio a final (era el tramo de más distancia con casi 50kms y 1000+). especialmente entretenido era bordear un embalse de bordes revirados seguido luego de un sendero al lado de una acequia infinita llena de agua tan inmóvil que, en ocasiones y de noche, se confundía con correr junto a una carretera comarcal. y es en tanto trote donde esta el peligro, sobre todo si la consigna es amanecer tan entero como si empezaras en ese momento. por eso en la mitad, justo entre el embalse y el canal y ya de madrugada, me encuentro con raúl y santi y paro a sentarme 5' a charlar. como cuando salías a la puerta de la discoteca para pillar aliento. mientras veo que albina duerme dentro del coche para recuperar fuerzas. recuerdo justo en este sitio, el año pasado, que el que dormía dentro del coche era mi hermano cuando pasé. y le tuve que despertar para decirle que pasaba. debía seguir entre los 8 o 10 primeros y en un amplio hueco donde no atraparía a nadie por delante ni nadie me vendría por detrás. en la última parte de este segmento un nervioso mastín me hizo pasar un mal rato al no ser capaz de ver si estaba atado o no mientras ladraba ofendido porque se me olvidó quitar las largas al pasar por delante de él. ¡qué carácter más perro!

había calculado salir ya sin frontal de la segunda base (penamacor) y así fue. allí ya son dos los que duermen en el coche y me asiste solo raúl. pero antes de irme los despertamos y recibo el empuje necesario para encarar un amanecer que me ha de llevar al punto donde me retiré el año pasado: el pueblo de montsanto. me avisan que el día vendrá calentito, con temperaturas en algunos momentos de más de 40º, y que habrá que cargar agua para evitar problemas. pues cargo! tengo 46kms por delante hasta la base de nossa senhora de azenha y hasta allí no nos veremos de nuevo todos. otra vez con la sensación de tener todo "controlado" pero con los nervios de ver como será la desconocida y temida zona de penha garcía (carreteraza antes, subida y bajada del castillo en medio y tramo desierto hasta la ermita de azenha al final). en mi cabeza ya le he puesto nombre a ese trozo: la romería. y mientras subo al pueblo de monsanto y paso trotando junto al pilón/piscina donde me retiré el año pasado me voy mentalizando para un terreno duro, seco y con ya bastante calor. la romería me regala a medio camino a un bar donde compro cocacola y agua con gas. sentado en una mesa, al lado de unos abuelos del pueblo que no paran de discutir, evito mirar al fondo del valle porque se que es donde he de ir y prefiero no ver como el calor que sale del suelo desdibuja un perfil ondulado y amarillo salpicado por un puñado de árboles

no lo pienso porque me quedaría en el bar todo el día. y sin pensar me voy recalentando camino de un buen plato de pasta. llego, llego, llegoooo y aun no ha llegado mi equipo. son las 12:23 cuando recibo un mensaje que dice que a las 12:30 están ahí. y llega la tranquilidad, con un buen manguerazo, un cambio de calcetines, comida y una "sugerencia": en la próxima base de vida vas a dormir, si o si. me lo paso a mi idioma y eso son menos de 29 kilómetros y 600+, eso es llegar a Idanha-a-nova, eso es -pienso yo- pasar durmiendo un rato de mucho calor y salvar la segunda noche en vela. otra vez con la luna de paseo. sugerencia aceptada :-)

contento, algo más fresco y buscando el rato de descanso en unas horas salgo bajo un sol inmisericorde, como un quijote sin sancho buscando mis gigantes para enfrentarme a ellos. por detrás ya empieza a acercarse luca papi...

miércoles, 24 de julio de 2024

pt281: #losjefes (I)

ni la p es de paraíso ni la t de terrenal. ni siquiera los 281 son 281kilómetros. porque pt281 son las coordenadas espacio/tiempo de un viaje físico y emocional que duró mucho más que las 47h25minutos35segundos que quedarán para siempre grabados en una página web. de hecho todavía esta vivo en la mente de todos los que lo compartimos cruzando casi del todo la península dos veces. y que dure…agua, tierra, fuego y aire. todo mezclado por un alquimista luso y su equipo para que los caballeros que lleguen beban la pócima del cáliz que descansa en el castillo de belmonte y salgan cada uno en busca de algo…de algo que no esta en ningún sitio más. agua, que sin ser un bien abundante es más que necesario y que puede significar la diferencia entre la llegada triunfal en proença-a-nova o el fracaso de todo por el camino. tierra, que mezclada con tramos asfalto, pisaremos tantas veces que podríamos echar raíces si parásemos más de lo justo. fuego, que como juez implacable abrasa a quien no le respeta y le envía a un infierno de calor, sequedad y penar. y aire, que mueve ramas pero no refresca, que a más de 40º convierte árboles en grupos de personas hablando y que incluso de noche hace espeso el respirar del guerrero exhausto que busca el abrigo de una base de vida.

empecemos.

tengo el mejor equipo. el mejor y punto. yo me lo creo y tengo claro que dependo de ellos para cerrar un círculo que tiene forma de “c” girada. por eso al salir del castillo de belmonte, camino de sabugal tengo pena de separarme de ellos. los primeros kilómetros se trotan tranquilo y todo el mundo va hablando con el vecino. porque la emoción lleva a eso, a la conversa sencilla y a conocerse. a la batallita que toque o el chiste malo último. pero detrás hay nervios, muchos nervios. y más cuando el año pasado lo dejé antes de la mitad. pienso también en los 1000m de desnivel positivo en los primeros 35kilómetros y pico cuando oigo un “donde vassss? qué haces el tercero?”, ¿véis? ¿véis como son los mejores? freno. poco a poco va pasando gente y cuando, a media subida, llego a un punto donde el año pasado lo pasé mal y tuve que parar ya voy sobre la décima posición. bien de agua, sin mucho calor. además esta hecho casi todo el desnivel y empieza a oscurecer. hay que sacar el frontal porque la primera noche esta a punto de empezar y “coronado” con mi propia luz bajo los pocos kilómetros que hay hasta donde cenaré. luego ya toca encarar la oscuridad que este año lucha contra una enorme luna llena que roba miradas mientras regala recuerdos y genera deseos. una luna que viene con bigotazo este año, el año de #losjefes. una luna a la que lo oscuro solo vence en zonas arboladas, porque en los secarrales deforestados y zonas de cultivo no tiene nada que hacer. fijaos que incluso hasta permite apagar el frontal largos tramos. apagar el frontal y pensar...


miércoles, 3 de abril de 2024

santi

nada será igual ya.

ni las cervezas de los viernes, ni los entrenamientos con calzador a deshoras, ni los dorsales torcidos en el pecho. por poner tres ejemplos. porque estábamos todos muy agustito a la sombra de ese bigote curvado hacia arriba por una gran sonrisa. porque después de ponernos a todos en solfa y demostrarnos como se gestiona con maestría y elegancia una situación complicada, has marchado sin molestar lo más mínimo...y sonriendo. porque cuando el problema que había era solo de actitud enfundabas la mano de hierro en el guante de seda y, con una sonrisa, nos la pasabas por la cara.

santi, te han arrebatado de nuestro lado dejando muchos ratos juntos pendientes y mucho aprendizaje por exprimirte. por si lo puedes leer, te cuento también como duele no poder escribirte provocando con el último partido del barça o no poder mandarte la captura de strava del último entreno que salió adelante "por tu culpa". o como ya no salto desde el sofá cuando me decías que había cerveza fría en la nevera para cerrar la semana y empezar el finde. siendo justos he de decirte también, si me escuchas, que gracias a ti soy mejor persona e intento cuidar mejor a la gente que me rodea, en especial a mi padre. que con tu empuje tengo gasoil para un montón de kilómetros más, de esos duros que parece que tienen 1.500m y son siempre en cuesta arriba. que abrazado a tu ejemplo me quejo menos y aprovecho más cada momento, aprovecho más la vida. también te digo que no me gustó que esta vida tardara tanto en juntarnos y nos haya dejado tan poco margen de maniobra. juntos habríamos hecho grandes cosas, ¿verdad, entrenador :-)?

tranquilo amigo, no sigo solo. el equipo esta aquí y, como una piña, haremos que tu legado dure todo lo que seamos capaces de aguantar. porque con buena actitud y sonrisa sincera nada, ni siquiera el fin de fiesta conseguirá sacarnos los colores por haber vivido de la mejor forma posible.

si, como dicen, el dolor es la debilidad que abandona el cuerpo te he de confesar que soy muy débil ahora mismo....pero volveré a ser fuerte, más fuerte si cabe!

nada será igual ya, santi. pero es que no queremos que lo sea...



jueves, 16 de noviembre de 2023

no lo sé

habré pasado por aquí más de cien veces y pocas veces me he parado un rato a disfrutarlo. y no hablo de un sitio sino de un pensamiento. vamos tan rápido por el borde el abismo que solo nos preocupamos de no caernos en él. no quitamos la vista del precipicio que amenaza engullirnos al menor error y gastamos todo el esfuerzo en no equivocarnos por las consecuencias que tendría hacerlo. muchas veces incluso sacamos pecho para explicarlo como una gran proeza, como un gran viaje a la luna cuando ni siquiera hemos despegado los pies del suelo. luego, cuando frenas y te giras, ¿no se os encoje el corazón viendo por donde has pasado?¿no os parece malgastado ese viaje?

un día. y otro día. esquivando el vacío para llegar al final...vacío? como mucho medio lleno.

el camino no nos lo va a cambiar nadie. porque es el que es y no siempre sabemos cual es. yo, al menos, el mío no lo tengo claro. pero a como lo recorremos si podemos meterle mano. pienso yo que podemos ir más tranquilos y mirar al lado contrario del peligro que nos acecha. porque desde la desaceleración estoy convencido que la amenaza es menor y da tiempo a valorar otras opciones. creo que a veces incluso podríamos parar y sentarnos con los pies colgando de ese abismo amenazador. de temerlo a gozarlo. abrir una(s) cerveza(s) y esperar. que salga la luna. o que salga el sol. que se vaya la luna. o que se vaya el sol. y retomar el camino desde la agustera que nos habrá quedado. si lo hacemos así, estoy convencido que al llegar al final no habrá la necesidad de girarse porque ya lo habrás visto todo. y si además lo hacemos acompañados de vez en cuando, mucho mejor.

el método no asegura la plenitud final. ni siquiera os puedo prometer que no haya tropiezos (porque hasta yendo despacio existe el riesgo) con caída y golpe. pero nos permite elegir el mejor sitio donde parar. donde sentarnos. y en lo que estoy dispuesto a apostar con vosotr@s es que el poso dejado es el de satisfacción de hacer bien las cosas. no tengáis duda que la sonrisa plena que decorará vuestra cara no se borrará a la primera de cambio.

¿y por qué, sabiendo esto, sigo pasando rápido y vigilando un borde que ocupa todos mis sentidos para llegar...para llegar...para llegar hasta donde se me acaben las fuerzas, no hasta donde yo quiero ir?

no lo sé.




jueves, 27 de julio de 2023

PTcientoveinte

el castillo de belmonte engullía poco a poco a todos los aventureros que iban llegando. los tragaba solos o en pequeños grupos, acompañados de familiares o con equipos de apoyo. incluso algún turista despistado contribuía a llenar la barriga de piedra del monumento. casi treinta minutos antes de volver a vomitarlos todos de golpe se oía ya desde fuera la megafonía con ese soniquete agradable que tiene el portugués. me recordaba esos conciertos para los que no tenías pase e ibas a escucharlos desde fuera con unas litronas.

pero para este sarao si tenía entrada. una plaza adquirida casi tres años antes que, por mucho tiempo que haya pasado, no me daba derecho a nada e incluso había relajado un poco los deberes que incluía. compartiendo nervios con mi hermano creo que fuimos parte del postre del edificio histórico donde nos agruparon para unos últimos consejos: mucho calor de día y algo de frio de noche. prohibido el apoyo entre bases de vida bajo la amenaza de la conciencia de cada uno para el resto de sus días. track, track y track. y poco más.

salir cuesta abajo nunca me ha gustado pero con un trote distraído y de charleta no es tan mala opción. dejamos pronto el pueblo y sus sombras atrás para meternos en los primeros kilómetros de solana. mezclando pista y asfalto, lo que se convertirá en la tónica del recorrido, avanzamos en un grupo de unos veinte coloridos personajes. con la elasticidad propia de todos los inicios el grupo se estira y las conversaciones se van apagando. de pelotón pasamos a hilera y de hilera a collar de cuentas multiforma. mientras avanzan los kilómetros se empieza a ver también el que es más andarín y el que es más trotón. y entreponiendo cierta distancia ya, nos vamos ubicando en nuestro ritmo cada uno.

con los últimos repechos que llevan a sabugal se comienza a ocultar el sol y hago cuentas para ver si puedo llegar a la base de vida sin parar a sacar el frontal. creo que me irá justo...pero creo mal y he de parar antes. la hora de menos y la situación más al oeste que hay en portugal frente a barcelona también entretiene pensamientos y provoca cuentas de horas por delante con luz artificial. y con menos calor. 

comer un plato de pasta y rellenar bidones. un poco de puesta al día con raul y salgo mejor que lo que he llegado (estaría bueno que no fuera así) camino de los siguientes oscuros cuarentayocho kilómetros hasta penamacor. sigo de cerca a un grupo de tres portugueses parlanchines que parece que vuelven de fiesta por lo animados que van. poco a poco baja la temperatura mientras trotamos junto a un embalse al que damos tooooda la vuelta. la proximidad del agua y alguna ráfaga de aire hacen correr algún escalofrío por la espalda sudada en aquellos tramos más pegados al borde. he pasado al grupo de fiesteros y en la más completa oscuridad encuentro el coche parado de mi hermano con él medio dormido dentro. me entretengo medio minuto y me rearma las ganas con dos palabras. no me lo esperaba ahí y el revulsivo ha funcionado...tanto que salgo disparado por donde no es y me equivoco de pista regalando unos quinientos metros. corremos ahora junto a una acequia y de nuevo oigo en la lejanía, pero por delante, a los parlanchines. inmediatamente localizo no muy lejos la luz de sus frontales. no hay mucha vegetación pero es una zona revirada donde hay bastante eco. me deben haber pasado en mi despiste pero me va bien porque llego con ellos a un pueblo donde me llevan directos a la fuente. en otros sitios la he tenido que buscar yo al no conocer los rincones. y me vuelvo a ir en la última parte.

en penamacor hay que subir hasta lo más alto del pueblo y puedo apagar el frontal con las farolas de las calles. de hecho ya entre dos luces bajo por el otro lado y no necesito volverlo a encender pues tenemos un ratito de parada en la segunda base de vida que nos acerca a las noventa kilómetros y a un nuevo día que viene calentito.

un tercer tramo tras beber caldo y comer salado que viene cargadito de arcén y va haciendo mella. con la línea blanca continua algo en la cabeza empieza a despistar la concentración. un tramo de pista con mucha arena suelta me deja a pleno sol buscando en el horizonte algo de subida. me faltan cuatrocientos positivos por estas alturas y pero lo que veo de subida esta muy cerca y no debe ser. o si. siempre que demos una vueltecita antes de encararlo :-)

creo que esta fue la chispa que prendió el fuego del dejarlo. creo que un tramo de asfalto largo y recto con la subida a monsanto constantemente a mi izquerda fue la gasolina que aceleró la combustión de las ganas de seguir. o puede ser que tras un último repecho a la sombra pero con calor, un pilón con agua fresca donde meter los pies fuera  el punto de no retorno a la carrera. dejarlo tras una subida. parar cuando venía bajada. no ser capaz de darle la vuelta a un aburrimiento que nunca me debió vencer...


kilómetro cientoveinte aproximadamente y mi pt estaba finiquitada con otro "apellido". con el poso de que algo ha quedado incompleto en mi. el aprendizaje de esta carrera no lo puedo tener en pirineos, en gredos o en los alpes. y me lo he llevado. pero en el puzzle del corredor que soy hay un hueco donde ahora mismo falta una pieza para que un día este completo. si el hueco se rellena o no es pronto para saberlo. se que yo tengo trabajo que hacer para volver como a mi me gustaría. y no quiero hacerlo solo...